Cuáles son los beneficios de hacer ejercicio al aire libre
El calor, los mosquitos y los patinetes eléctricos zumbando de un lado a otro pueden hacerle dudar de si realmente merece la pena hacer ejercicio al aire libre. Las investigaciones demuestran que sí, que la actividad física fuera de casa o del gimnasio tiene algunos beneficios. Por ejemplo, correr y caminar al aire libre puede reducir los estados de ánimo depresivos y ser un buen remedio contra la ansiedad.
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Además, los deportes al aire libre pueden ayudar a reponer la dosis diaria de vitamina D. Este compuesto del sol no sólo es bueno para la salud ósea: también puede tener un efecto positivo sobre la tensión arterial y los niveles de colesterol, la inmunidad general y la salud pulmonar y muscular. Así pues, cuando haces deporte al aire libre, le estás dando a tu cuerpo el apoyo integral que necesita para sentirse con energía, positivo y tranquilo.
Ejercicios para entrenar al aire libre sin preparación especial
Calentamiento
No te saltes esta fase: en cualquier entrenamiento conviene «despertar» los músculos y prepararlos para la carga que se avecina. Realiza flexiones y giros de la cabeza y el cuerpo, tuerce las muñecas, los hombros, los codos y las rodillas – esto ayudará a evitar crujidos desagradables durante los ejercicios principales.
Es importante tener en cuenta el ritmo al que piensas entrenar a continuación. Si decides hacer cardio intenso, no te limites a los ejercicios de articulaciones: añade algunos saltos, por ejemplo con una cuerda de saltar, o carreras: en el sitio, shuttle run o carrera simple a un ritmo cómodo.
1. Sentadillas
Las blogueras de belleza y los profesores de gimnasia promueven este tipo de ejercicio por una razón: unas sentadillas adecuadas te ayudarán a bombear muslos y glúteos. Y también: a entrenar la movilidad de las articulaciones de la cadera y el tobillo. Sin embargo, los errores al realizar sentadillas pueden, por el contrario, dañar el cuerpo – por ejemplo, lesionar la articulación de la rodilla.
2. flexiones
Este ejercicio resulta familiar a muchos desde la escuela, pero no todo el mundo lo realiza correctamente. En las flexiones hay que colocar las manos separadas a la altura de los hombros, mantener las muñecas estrictamente debajo de los hombros y apuntar los codos hacia atrás. Los errores de técnica aumentarán la carga sobre las articulaciones.
Si estás empezando a entrenar, puedes simplificar las flexiones de dos maneras. La primera consiste en bajar las rodillas hasta el suelo. La segunda – sin estar de pie en el tablón, apoye las manos en la pared: los pies deben estar un poco más lejos de la pared.
Y si, por el contrario, las flexiones habituales te parecen demasiado sencillas, intenta aumentar la carga apoyando los pies en una barra baja. O experimenta con variaciones del ejercicio. Por ejemplo, haz flexiones spiderman: mientras bajas al suelo, tira alternativamente de las rodillas hacia los codos.