Proteger el suelo laminado de quemaduras y arañazos
1. Coloque una alfombrilla en la entrada exterior
Así la suciedad, la nieve, la arena y otros residuos no llegarán al suelo. Coloque también alfombrillas en las zonas del piso por las que camine con frecuencia. Por ejemplo, delante del fregadero y de la cocina. Así protegerá el suelo laminado del desgaste.
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2. Coloque protectores en las patas de los muebles
Si mueve mesas y sillas pesadas con frecuencia, su suelo laminado se rayará inevitablemente. Asegúrese de poner almohadillas protectoras en las patas de los muebles que mueve con frecuencia. Por ejemplo, sillas y taburetes en la cocina.
3. Cubra las ventanas con cortinas para evitar que la luz solar directa incida en el suelo.
El calor excesivo y la luz brillante pueden hacer que el suelo laminado pierda color. Protéjalo cubriendo las ventanas con cortinas o persianas.
4. Mueva las alfombras y los muebles de vez en cuando
Si los mantiene en el mismo lugar durante varios años, el suelo laminado envejecerá de forma desigual. Una vez al año, intente cambiar de sitio los muebles y las alfombras para que el suelo no quede con manchas decoloradas.